Los Mejores Chistes para Militares

Los Mejores Chistes para Militares

Estos son los mejores chistes militares que la Internet tiene para ofrecer, así que ya pueden comenzar a compartirlos con sus compañeros cuando tengan algo de tiempo libre durante el desempeño de sus funciones:

  • Malas Noticias para las Tropas:

El capitán llamó al sargento y le dice :

-Sargento, acabo de recibir un telegrama de que la madre del soldado Jones murió ayer… así que será mejor que se lo diga personalmente y después de ello lo envíe a verme-

Así que el sargento pide su formación matutina y alinea a todas las tropas, tras lo cual les dice:

-Oigan, hombres con mucha atención… Johnson, reportese al comedor para informarle al personal que deben firmar algunos papeles y el resto de los hombres se reportarse para realizar labores mantenimiento a varios vehículos… ah! por cierto, Jones, tu madre murió, según el informe del comandante.

Más tarde ese día el capitán llamó al sargento a su oficina y le dijo:

-Hola, Sargento, debo decirle que aquella fue una manera muy fría de informar a Jones que su madre había muerto. ¿No podría ser más cuidadoso la próxima vez?

-Sí, señor -respondió el sargento-.

Unos meses más tarde, el capitán volvió a llamar al sargento hasta su oficina.

-Sargento, acabo de recibir un telegrama que informa sobre la muerte de la madre del soldado McGrath. Será mejor que vaya de inmediato a decirle y luego lo envié a verme, recuerde será más cuidadoso esta vez…-

Así que el sargento pide su formación matutina y le dice a sus hombres:

-Ok, hombres, cállense y escuchen con atención… Todo el que tenga una madre con vida, por favor dar dos pasos al frente… ¡hey! ¡No tan rápido, McGrath!»

  • Preguntas al Veterano:

El niño tenía que hacer una tarea para la escuela secundaria que consistía en preguntarle a un veterano sobre algunos detalles en relación a la Segunda Guerra Mundial, así que aprovechando la oportunidad que su padre había servido en Filipinas durante la guerra, decidió elegirlo para llevar a cabo la asignación.

Así que poco tiempo después de hacerle algunas preguntas muy básicas, decidió preguntarle muy cuidadosamente:

-¿Alguna vez mataste a alguien?-

Su papá guardó silencio durante unos segundos y luego, con voz suave, le dijo:

-Muy Probablemente. Yo era el cocinero.-

  • La Llamada a la Clínica:

El sargento Wilson se estaba recuperando de una operación mientras reposaba en la habitación 302, por lo que la enfermera de turno recibió una llamada telefónica preguntando por su estado y sobre cómo había resultado la operación, así que ella respondió que todo iba bien, lo habían sacado del quirófano hace unas dos horas y él estaba descansando en estos momentos, con recuperación completa esperada en el lapso de un día o dos cuando finalmente sería dado de alta.

Luego de ello, la persona que llamó agradeció a la enfermera, y justo cuando ella estaba lista para colgar, pensó que se suponía que la persona que llamaba era una amigo cercano o un pariente del sargento, razón por la cual preguntó:

-¿Podría usted por favor identificarse?

La persona que llamó le dijo:

-Sí, le habla el sargento Wilson desde la habitación 302… verá NADIE nunca me dice nada-

  • Fe en Dios:

Había una vez un hombre religioso que era muy aficionado a Dios, por lo que un día hubo una inundación bastante grande y un Ranger del Ejército vino a rescatarlo diciendole:

-Señor, por favor, venga conmigo o seguramente se ahogará-

El hombre tranquilamente respondió:

-No, creo en Dios y sé que él me rescatará-

A medida que el agua se hacía cada vez más profunda, un helicóptero de los Estados Unidos voló por encima de él y un marine le gritó:

-¡Salta de una vez o te ahogarás!-

De nuevo el hombre respondió:

-No, yo creo en Dios y sé que él me rescatará-

Pronto el agua estaba ya hasta su nariz y un hombre de la marina de guerra vino en un barco y le dijo,

-¡Salte al barco buen hombre!-

Otra vez el hombre dijo:

-No, yo creo en Dios y sé que él me rescatará-

Finalmente, un avión de la Fuerza Aérea apareció y, sobre el fuerte rugido, una voz le dijo:

-¡Señor, si no se agarra a nuestra cuerda, morirá sin remedio!-

Efectivamente, el hombre se ahogó, así que cuando estuvo parado ante las puertas nacaradas del cielo, por fin ve a Dios y le dice:

-¿Qué fue lo que pasó?, soy una persona muy devota hacia ti y Tú me dejas ahogar… ¿Por qué no me salvaste?-

Y Dios le respondió:

-¡Tú imbécil, traté de salvarte, envié al Ejército, a la Armada, a la Fuerza Aérea y a los Marines! ¿Cómo crees que te encontraron?-

  • Saludando a un Superior:

En el Fuerte Benjamin Harrison, ubicado en Indiana, había una Escuela de Información de Defensa que tenía varios hombres y mujeres enlistados como instructores, así que durante el verano, muchos oficiales reservistas asistieron a la escuela.

Un día, una capitana caminaba hacia la escuela y cuando se acercaba a la entrada principal, un sargento (instructor) salió corriendo de la escuela y corrió a la derecha pasando a su lado, por lo que esta se detuvo en seco y se volvió hacia el sargento gritándole:

-¡Sargento!, ¿sabe usted cómo saludar a un oficial?-

Inmediatamente, el sargento le respondió sin vacilar:

-Sí, mamá… pero no tengo tiempo para enseñarlo ahora mismo»-

  • Caníbales:

Había una vez un funcionario de la marina, un guardabosque del ejército y un marine, quienes estaban en una misión de reconocimiento, pero el funcionario de la marina cometió un error comprometiendo su posición, lo que trajo como resultado que fueran capturados por una peligrosa tribu caníbal. Así que el jefe de la tribu se presentó ante ellos y les dijo que les dejaría decidir cómo iban a dejar este mundo, pero una vez que mueran él mismo usaría la piel de cada uno para hacerse una canoa.

Bien, el funcionario de la marina sube y saca su fiel cuchillo del bolso e inmediatamente se apuñala. La tribu grita de emoción y cuelga su piel para que esta se empiece a secar.

El Guardabosques del Ejército es el siguiente que saca su rifle y se dispara a sí mismo, por lo que la tribu se vuelve loca de nuevo y hace lo mismo con su piel poniéndola a secar al sol.

Bueno, el Marine es el siguiente quien al final decide pedirles un tenedor, tras lo cual se va a los arbustos. Así que dos horas más tarde el jefe va a comprobar el estado del Marine, por lo que encuentra al hombre apuñalándose a sí mismo con el tenedor haciendo pequeños agujeros en su piel.

El jefe, extrañado ante lo que está presenciando, decide preguntarle qué rayos está haciendo, por lo que el Marine le respondió:

-Estoy arruinando su canoa-